domingo, 22 de noviembre de 2009

22-11-09

¡Ya tengo un seguidor! Debo de ser bastante bueno, jeje...


Tras recordar que el diario no me hizo daño (al menos no mucho), he decidido seguir con él durante un tiempo, para ver si me gusta.


En la anterior entrada, comenté que mi trabajo es muy estresante, pero no especifiqué cuánto. Soy cazarrecompensas. La gente acude a mí y me dice:


-Tengo un problema, me han robado una obra de arte muy valiosa, Pero no puedo denunciarlo a la policía porque yo lo robé de un museo.


Entonces yo busco al tipo ese, le pido educadamente que me lo dé, y como no suele funcionar, se lo quito por la fuerza. El ladrón escarmienta, el otro ladrón tiene su preciada propiedad y yo mi dinero. ¿Se nota mucho mi falta de ética?


Lo malo es que esto no es lo peor que hago. A veces, la gente hace cosas que a otros les molestan bastante, y yo hago que esa gente se arrepienta. Sale más caro, pero doy garantías de que el trabajo se realizará.


Pero también hago cosas buenas. Tengo un amigo en la policía que me dice por quién dan recompensa antes de que lo sepa el resto. Meto entre rejas al maleante y me saco un dinerillo extra. Como ya he dicho antes mi ética es reducida.


Y hablando de mi trabajo, mi amigo Jake (el que me recomendó el diario) es compañero de oficio. Nos contamos casos cerrados, nos damos soplos y en ocasiones trabajamos juntos. Además, ¡los dos somos vampiros! Estamos hechos tal para cual.


Un momento, ahora que me acuerdo ¡no he comido! Me voy, que tengo una bolsa de A+ esperandome.

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