sábado, 7 de agosto de 2010

7-8-10

No puedo más que pedir perdón por mi falta de regularidad de nuevas entradas en el blog. Prometo aprovechar los días de verano para poner al día mi historia.

Llevo varios meses intentando averiguar a qué se refería Roddy en nuestra conversación y no he encontrado nada. En otros casos tengo que seguir pistas; en éste no tengo absolutamente nada. Ninguno de los secuestradores tenía familia cercana y sus amigos nunca notaron nada diferente en ellos. En sus casas no había nada relacionado con lo ocurrido y sus ordenadores y cuentas de correo estaban limpias.

Y encima la policía no ha abierto ninguna investigación por la muerte de Roddy. Dicen que fue natural, pero lo que yo vi no era natural. En el momento en que se lo dije, me informaron de que los de arriba habían decretado que acabado el caso, acabada nuestra colaboración, así que me he quedado sin apoyo policial.

No es que me importe mucho, sigo teniendo a Mario para ayudarme, pero me preocupa que alguien importante pueda estar metido en el ajo, porque si es así podría meterme en un lío muy gordo.

De momento sigo igual que al principio.